Confinamiento con Prem Rawat – Día 77

“El desafío es ponerse en contacto con lo fundamental en nosotros, no con quien queremos ser.” – Prem Rawat

Los videos diarios de “En Confinamiento” de Prem Rawat presentan sus charlas, y cómo el Programa de Educación para la Paz ayuda a las personas a descubrir la paz personal. Mantente en contacto para informarte de los detalles sobre cómo reunirte virtualmente con Prem en un futuro próximo.

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La necesidad de paz
Prem Rawat habla con voluntarios del Cuerpo de Paz que cuenta con más de tres millones de miembros en Malasia.

Como ser humano tengo una necesidad. Y esa necesidad es estar en paz.

Así que, cuando nos olvidamos de lo que es fundamental para nosotros, ¿qué ocurre? Perdemos el equilibrio. Les contaré una breve historia. Las historias son bonitas.

Había una vez un mago muy poderoso, un hechicero que no tenía hijos propios y su esposa siempre le pedía: “Sería lindo que alguna vez pudiéramos tener un hijo”. Pero no ocurrió.

Un día, el hechicero iba caminando por la calle y se encontró un ratoncito que estaba herido. Lo recogió, se lo puso en la mano e invocando sus poderes convirtió el ratoncito en una niña pequeña muy hermosa. Le llevó la niña a su esposa y le dijo: “ya que siempre me estás pidiendo que traiga un bebé, hoy lo he hecho. He aquí una hermosa niña para ti”.

Ella se enamoró del bebé y él también. Con gran dedicación criaron a esta hija, la cuidaron, le dieron una gran educación y ella resultó increíblemente dotada. Cuando creció, no solamente era muy bella sino que también era muy sabia, muy culta y de una naturaleza muy bondadosa y agradable.

Un día, el hechicero se le acercó y le dijo: “Querida: ha llegado la edad de casarte. ¿Con quién te gustaría casarte?” Ella lo pensó y dijo: “bueno, ¿cuáles son las posibilidades?” y el hechicero dijo: “Le llevaré la propuesta a diferentes personas y te contaré lo que me dicen”.

Así que se dirigió a la poderosa montaña y le dijo: “¿te gustaría casarte con mi hija?” y la poderosa montaña dijo: “Ay Dios mío, la he estado observando y es tan hermosa, tan inteligente, tan bondadosa, tan maravillosa… ¡Me encantaría que fuera mi esposa!”

Le llevó la propuesta a la hija: “Querida hija: A la montaña le encantaría casarse contigo. Es poderosa y fuerte… ¿te gustaría?” y ella dijo: “No, la verdad es que no.”

Se dirigió al océano, le propuso al océano y el océano dijo: “Ah sí, la he visto, es preciosa. Me encantaría casarme con ella”. Le llevó la propuesta a su hija… “No. No me quiero casar con el océano”.

Se dirigió al rey quien le dijo: “Ah sí, he oído de su belleza. Me encantaría casarme con ella”. “¿Quieres casarte con el rey? Vivirás como una princesa el resto de tu vida.” “No. no me quiero casar con el Rey.” “¿Y con el príncipe, o con el emperador?” Se le presentaron todas estas propuestas y ella dijo “no, no, no y no”. Y ahora, el hechicero desconcertado le dice: “Te he traído todas estas propuestas increíbles y las ha rechazado todas. ¿Hay alguien, alguien con quién quieras casarte?”. Justo en ese momento pasaba un ratoncito corriendo, ella lo vio y dijo: “Si. Con eso.”

El hechicero se dio cuenta de quién era ella… Aunque él la había transformado en un ser humano, la había educado y todo, ella no se había olvidado de quién era. Su naturaleza seguía siendo la misma a través de todas las diferentes situaciones. Su naturaleza no había cambiado y cuando vio al guapo ratoncito le resultó mucho más atractivo que la montaña, el rey, el príncipe, el emperador, el océano y todo, porque esa era su naturaleza.

Entonces, la moraleja de la historia es que vivimos en este mundo, la tecnología ha cambiado, muchas cosas han cambiado, pero nosotros seguimos siendo seres humanos. Seguimos siendo seres humanos. El tema aquí es: “¿Qué es un ser humano?”.

Cuando hago esta pregunta por el mundo, uno pensaría que cada ser humano te diría exactamente qué es un ser humano, ¿verdad? Pero no es así, porque los seres humanos se han olvidado de quiénes son. Y no solo se han olvidado de quiénes son, sino que se han olvidado de cuáles son sus verdaderas necesidades. ¿Cómo es?

Tienes que comprender la diferencia, entre “necesidad” y “deseo”. La necesidad es aquello sin lo cual no puedes existir. Lo necesitas. Necesitas aire, necesitas calor, alimento y agua.

La televisión es un deseo. Sin aire morirás. Si no ves la televisión no te vas a morir. Pero, en nuestra sociedad, hemos cambiado tanto mentalmente que pensamos que “si no puedo ver la televisión me moriré”.

Le damos todo el valor, toda la importancia, al igual que el mundo se la da, a todo lo que hacemos, pero no le damos importancia a lo que verdaderamente comprendemos.

Así que cuando alguien como yo viene y quiere hablar de la paz, yo creo que es algo triste, porque yo no debería estar hablando sobre la paz. Eso debería ser algo que la gente ya supiera, que la paz es una necesidad y sin ella no puedes tener felicidad. Y sin felicidad, salud y dinero no puedes tener prosperidad. La prosperidad no es solo una cosa.

Y para nosotros, sobre la faz de la tierra, el desafío es ponernos en contacto con lo que fundamentalmente somos. No con quien queremos ser, porque es allí donde nos hemos perdido.

Es igual con la paz. La gente cree que hay que traer la paz de otro lugar. Las personas me dicen: “Estoy buscando la paz”, y yo les digo “no la encontrarás”. ¿Por qué no encontrarás paz si ya la estás buscando? Porque ya la tienes.

Puedes buscar donde quieras buscar, porque la suposición es que “la paz no está en ti” y esto es lo que inspira la búsqueda. Pero la suposición es equivocada porque la paz está en ti, el bien esta en ti, el mal está en ti, lo correcto está en ti, lo incorrecto está en ti.

La gente dice: “Hay tantas cosas malas sucediendo en este mundo, ¿cómo es posible?”. Y yo les digo: “Si, hay cosas malas sucediendo en este mundo pero en cada ser humano también está el bien y eso no ha sido alimentado, no ha sido regado, no ha sido cuidado”.

Así que, esa es la situación del mundo. Pero… ¿y tú? Somos seres humanos y nuestra naturaleza no es sólo el dinero sino que es la bondad, la generosidad. Nuestra naturaleza es amar, sentir, comprender. Y esos son los regalos que puedes dar no sólo a ti mismo, no solo a tus semejantes, los seres humanos, sino a tu familia y a quien quieras.

Y lo hermoso acerca del regalo de la generosidad, el regalo del amor, el regalo de la bondad, de la comprensión, es que cuanto más lo das más recibes. Porque solo crecerá, no disminuirá.

Con el dinero no es así: cuanto más dinero das menos te queda a ti, por eso todo el mundo trata de guardárselo. Pero el regalo de la comprensión y del amor, cuanto más lo compartes más tienes.

La paz comienza contigo, es así de sencillo: la paz comienza contigo. Con que tú comprendas quién eres. No se equivocó Sócrates al decir “Conócete a ti mismo”. Conocer quién eres.

Esto es todo lo que quería decir, porque también va a haber una sesión de preguntas y respuestas.

Individuo:

Sospecho que hay una relación entre todos estos problemas de los que hablamos y la paz.

¿Quizá nos puedes decir cómo se relacionan entre sí?

Prem Rawat:

Sucede que el sol no conoce la noche. La oscuridad no conoce la luz, la luz no conoce la oscuridad. Si la paz estuviera relacionada con estos problemas, la paz no tendría ninguna oportunidad, pero se eleva por encima de los problemas y no tiene nada que ver con ellos, porque estos problemas, vienen y van.

Las personas tienen problemas, se olvidaron de cargar sus teléfonos móviles. Hace 300 años las personas no tenían ese problema. Así que no entendemos que cada vez que resolvemos un problema, creamos otro.

Pero para mí, gracias a Dios, los problemas están en un nivel y la paz está en otro. La paz no va a tocar nuestros problemas y gracias a Dios estos problemas no van a tocar a la paz. Conservará su pureza. Conservará su pureza.

Es como el agua. Puedes ensuciar el agua muchísimo, pero encontrará la manera de purificarse sí misma. Esta es una cualidad el agua. No la puedes quemar. Si intentas hacerlo se evaporará, se convertirá en vapor, se mezclará con el aire y tendrá lugar el proceso de enfriamiento adiabático: tienes una nube que se convierte en una tormenta, purifica el agua y llueve. Se puede purificar a sí misma, esa es su cualidad.

Y si te conocieras a ti mismo, te darías cuenta de que no tienes que estar en la cloaca de los problemas, que tú no eres tus problemas. Eres otra cosa, algo diferente, y tus problemas están en un nivel completamente diferente.

La inconsciencia traerá problemas. La conciencia elimina los problemas y la paz bailará en el corazón de cada ser humano, esperando a que la inviten a presentarse, porque la paz será el mayor logro del ser humano. No ir a la Luna y a Marte. La paz será el mayor logro del ser humano.