«Inocencia»: Percibir lo que es, tal cual es.
Prem Rawat:

¿Qué perdemos en nuestra vida?
Está esta cosa, esta palabra,
y la palabra es «inocencia»
Y es…
es una palabra hermosa,
y alude a algo que también es bello:
«la inocencia.»
¿En qué sentido uso esa palabra: «inocencia»?
Percibir lo que es,
tal cual es.
Sin complicaciones.
Ver una montaña
y ver
¡una montaña!
Ver la luna
y ver
la luna.
Ver el sol
y ver el sol.
Cuando empiezas a decir: «para mí la montaña significa esto,»
has perdido la inocencia, perdiste la capacidad
de ese bebé, de esa criatura, de ver lo que es, tal como es.
Ni más,
ni menos.
Sin un millón de conexiones.
Ver una cometa
como lo que la cometa es.
Ver el rocío como lo que el rocío es.
Ver la flor
como lo que la flor es.
Y de hecho,
verte a ti mismo
como verdaderamente eres.
No a través de la lente de tus problemas.
No a través de las máscaras de tus problemas.
Sino de verdad,
tal como eres:
un ser humano.
Un ser humano.
¿Alguien que reacciona ante el dolor, la pena y el sufrimiento? Absolutamente.
¿Que también reacciona ante la dicha, la claridad y la comprensión?
Absolutamente.
Tú reaccionas
ante la pena.
¡Es así!
La pena puede hacerte reaccionar
pero la dicha también.
La mayoría de la gente
se esfuerza por sentirse bien.
Y créanme, hay diferentes niveles de «sentirse bien»
Algunos han hecho tanto esfuerzo por sentirse bien, y no lo han logrado.
Así que aceptarán lo bueno que haya por poco que sea,
diciendo: «sí, hoy estuvo bien».
¿Pero sabías
que entre todas las cosas a las que reaccionas
hay algo que siempre está sucediendo dentro de ti,
que es más grande que la suma de todos tus problemas?
Conocerte a ti mismo incluye eso,
no lo excluye, sino que lo incluye.
Cada vez que este aliento entra en ti
es uno de los milagros más increíblemente serios que suceden.
La razón principal
por la que estoy aquí hoy
y por la que voy a ir a Europa
es en realidad
para recordarte
que lo que tienes dentro de ti no tiene precio.
Permite que eso se manifieste en tu vida.